ENTIENDA EL HAMBRE

¡EN BRASIL, 8,7 MILLONES DE PERSONAS PASAN HAMBRE¹!

¿Sabe lo grande que es esto?

¡SON 110 MARACANÃS LLENOS!

Aún así, 64 millones de Brasileños sufren algún grado de inseguridad alimentaria². Pero aunque sólo hubiera una persona que no tuviera suficiente para comer, seguiríamos teniendo un problema. Al fin y al cabo, la alimentación es un derecho humano³.

¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE INSEGURIDAD ALIMENTARIA Y HAMBRE?

Inseguridad alimentaria
leve

Inseguridad alimentaria leve

Cuando la persona está preocupada o insegura de si tendrá comida en el futuro, y cuando renuncia a la calidad para no renunciar a la cantidad.

Inseguridad alimentaria moderada

Inseguridad alimentaria moderada

Cuando tenga que comprar o comer menos, o cambiar sus hábitos alimentarios.

Inseguridad alimentaria grave (hambre)

Inseguridad alimentaria grave (hambre)

Es cuando no tiene comida ni dinero para comprarla, o cuando sólo come una vez al día, o peor aún, cuando pasa un día o más sin comer nada.

Seguridad alimentaria

Seguridad alimentaria

Cuando una persona tiene seguridad alimentaria, significa que tiene acceso regular y permanente a alimentos de calidad y en cantidad suficientes, sin comprometer el acceso a otras necesidades esenciales, como su vivienda, sus facturas, etc.

Pero la realidad en Brasil es muy diferente. Desgraciadamente, el hambre nos acompaña desde hace siglos. Es un problema complejo, con raíces profundas y diversas, que aún no se ha resuelto.

EL HAMBRE EN BRASIL TIENE DIRECCIÓN, COLOR Y SEXO.

Más de la mitad de los hogares que pasan hambre están en el norte y el noreste.

El hambre es 2,4 veces mayor entre las personas sin estudios que entre aquellas con estudios secundarios completos.

El 31,7% de los hogares encabezados por mujeres están expuestos al hambre. En las que el responsable es el hombre, la tasa es del 23,2%.

Los hogares negros tienen 2,2 veces más probabilidades de vivir con hambre que los hogares blancos.

3 de cada 10 familias brasileñas viven con algún grado de Inseguridad alimentaria.

El hambre es 4,3 veces mayor en las personas desempleadas que entre las que tienen trabajo.

Los hogares rurales tienen 1,4 veces más probabilidades de pasar hambre que los hogares urbanos.

COMPRENDA EL DESPERDICIO DE ALIMENTOS

Al mismo tiempo que miles de personas no saben cuándo y si tendrán suficiente para comer, nosotros vivimos una incoherencia: somos uno de los cinco mayores productores de alimentos del mundo y uno de los 10 países donde más comida se desperdicia.

Brasil produce 161,3 millones de toneladas de alimentos al año.

Se calcula que de este total, 55,4 millones de toneladas se desperdician cada año, desde el campo hasta el hogar del consumidor.

¡EQUIVALE A 2 MILLONES DE CAMIONES PESADOS!

No podemos permitir que se desperdicie tantos alimentos mientras miles de personas no saben si tendrán suficiente para comer.

 

En Brasil aún no existe una metodología oficial e integrada para analizar el desperdicio en cada eslabón de la cadena alimentaria. Por eso, darse cuenta de la magnitud del problema y medir el impacto de cada etapa es todo un reto.

EL CAMINO DEL DESPERDICIO DEL CAMPO AL PLATO

17,3 MILLONES DE TONELADAS

31,2%

10,8 MILLONES DE TONELADAS

19,5%

11,9 MILLONES DE TONELADAS

21,5%

7,9 MILLONES DE TONELADAS

14,3%

7,5 MILLONES DE TONELADAS

13,5%

EN TOTAL, CADA AÑO SE DESPERDICIAN 55,4 MILLONES DE TONELADAS DE ALIMENTOS.

¿CUÁLES SON LAS CAUSAS DEL DESPERDICIO?

  • Factores climáticos como sequías y lluvias torrenciales;
  • Plagas;
  • Malas prácticas de producción y cultivo;
  • Maquinaria, equipos e instalaciones viejos o que funcionan mal;
  • Condiciones de transporte;
  • Problemas logísticos;
  • Almacenamiento ineficiente;
  • Embalaje inadecuado;
  • Manipulación incorrecta de los alimentos;
  • Eliminación de alimentos “feos” o defectuosos.

En la etapa de consumo, el desperdicio de alimentos está más asociado a cuestiones de comportamiento. Una investigación realizada en 2018 por Embrapa en colaboración con la Fundación Getúlio Vargas revela algunos rasgos de los hábitos y costumbres de la cultura latina que explican por qué los alimentos acaban a menudo en el basurero.

De las 1.746 familias brasileñas entrevistadas:

  • El 77% cree que es importante que la comida sea fresca;
  • El 68% cree que es importante tener la despensa llena;
  • El 61% prefiere hacer una gran “compra del mes”;
  • Al 59% no le importa si hay demasiada comida;
  • El 52% considera importante tener en abundancia.

Lugar de comida é no prato

Quer saber como você pode contribuir para reduzir o desperdício de alimentos no seu dia a dia? Baixe o guia gratuito “Lugar de Comida é no Prato”.

El desperdicio de alimenticios generan impactos medioambientales en toda la cadena de producción, ya sea por el uso intensivo de la tierra y los recursos hídricos, la emisión de gases de efecto invernadero, la intensificación de la pérdida de biodiversidad o la generación de basura.

El desperdicio de alimentos es responsable del 8-10% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero (gei) – 5 veces más que las emisiones del sector de la aviación.

En este proceso se utiliza 1/3 de la tierra agrícola.

El hambre es un problema estructural y está causado por muchos factores diferentes. Por eso sabemos que no puede resolverse reduciendo el desperdicio de alimentos.

DESPUÉS DE TODO, ¿CÓMO ES POSIBLE TIRAR TANTA COMIDA MIENTRAS MILES DE PERSONAS PASAN HAMBRE?

Es hora de unir fuerzas para transformar esta realidad y construir un futuro en el que ¡ningún brasileño tenga hambre!

Superar este reto no es ni sencillo ni fácil. Requiere una acción conjunta y coordinada entre gobiernos, empresas y ciudadanos.

Este pacto empieza aquí. ¿Vamos juntos?

LOS ALIMENTOS QUE SE DESPERDICIAN TAMBIÉN AFECTAN AL CLIMA Y AL MEDIO AMBIENTE

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